Notre Dame, una joya arquitectónica que sobrevivió a guerras e incendios
La Catedral de Notre Dame de París, que se incendió este lunes 15, es uno de los monumentos más emblemáticos de la capital francesa, donde han pasado hitos en la historia del país, y una de las obras claves de la arquitectura gótica.
La catedral de Nuestra Señora (en francés, Cathédrale Notre Dame), situada en la pequeña isla de la Cité, rodeada por las aguas del río Sena, es una catedral de culto católico, sede de la arquidiócesis de París, y se trata de uno de los edificios más antiguos del estilo gótico.
Su construcción comenzó en el año 1163 y se terminó en el año 1345, y está dedicada a María, madre de Jesucristo, por lo que se convirtió en uno de los monumentos más populares de la capital francesa para los turistas, con un total de 13 millones de visitas anuales.
«Su fama no está sobrevalorada: es una de las obras maestras de la arquitectura gótica. Más que un monumento histórico, esta catedral es sobre todo «la Casa de Dios y la Casa del Hombre», porque este edificio, que vive de la fe y la oración de los fieles, está cargado de experiencias humanas y cristianas», afirman en el sitio web oficial de la catedral.
El sitio elegido para erigirla es un lugar especial, ya que en la isla de la Cité los celtas celebraban sus cultos en la antigüedad. También es el lugar donde existió la primera Iglesia de París: la Basílica de Saint-Etienne.
La construcción de la Catedral comenzó luego de que Maurice de Sully fuera elegido obispo de París en 1160, cuando propuso la demolición de la antigua Saint-Étienne y construcción de Notre Dame.
En presencia del papa Alejandro III, en 1163 se comenzó la construcción de la catedral con el estilo gótico, que demostró las aspiraciones de la sociedad en esa época, cuando la ciudad resurge en lo político y en lo económico, al ascender la burguesía adinerada.
Varios arquitectos participaron en el proyecto, incluyendo diferentes modificaciones a lo de largo de los años.
La primera gran alteración tuvo lugar a fines del siglo XVII (en el Reinado de Luis XIV), cuando los sepulcros y vidrieras se sustituyeron por elementos del estilo barroco.
Durante la Revolución Francesa muchos elementos de la Catedral fueron destruidos y varios tesoros robados, se narra a través de la web de la Catedral.
En esta catedral tuvieron lugar acontecimientos muy importantes para la historia de Francia como la coronación de Napoleón y Enrique IV, o la beatificación de Juana de Arco.
La catedral de Notre Dame de París tiene forma cruz latina, con un gran cuerpo de cinco naves, más capillas laterales.
La nave principal tiene de un total 127 metros de largo y 48 de ancho. El transepto (una nave transversal que forma el brazo corto en una iglesia) particularmente corto, tiene 14 metros de ancho y 48 metros de longitud, es decir, la misma medida del ancho de la nave.
A su vez, la edificación alcanza en la aguja (cúpula) una altura máxima de 96 metros y una superficie total de 5.500 metros cuadrados.
En la organización de la fachada, que sigue un patrón jerárquico y geométrico, se pueden distinguir la torre norte, la torre sur, la Galería de las quimeras, el rosetón occidental, la Galería de los reyes y las tres puertas de acceso que representan a la Virgen, el Juicio Final y Santa Ana.