Frank Fiegel y la historia del marinero que inspiró a Popeye
Popeye es uno de los personajes más conocidos y a su vez clásicos a la hora de hablar de historietas y dibujos animados. Sin embargo, quizá pocos sepan que ese marinero que se volvía fortachón al comer espinacas realmente existió.
Si bien comparando rostros son similares, los nombres son totalmente distintos, más si decimos que Frank “Rocky” Fiegel fue el marinero real que inspiró a Popeye.
Fiegel fue un polaco que residió en el estado de Illinois y, según pudo saberse, era una persona que solía tener un temperamento extremo que lo llevaba a pelearse continuamente, incluso sin medir oponentes; llegando a tomarse a golpes de puño con hombres mucho más grandes que él.
Lo que llamaba la atención era que, si bien era una persona pequeña, su fuerza no lo era y en casi todas las oportunidades salía victorioso en sus reyertas.
Fiegel además, era conocido por otras facetas: su amabilidad y –sobre todo- su cariño hacia los niños y su apodo, “Pop eye” (u ojo saltón).
Ahora bien, ¿cómo su figura fue inmortalizada en las historietas y dibujos animados? Fiegel era vecino de Elzie Crisler Segar, quien se inspiró en el aspecto del marinero para crear al personaje que, por primera vez, fue publicado en el diario New York Journal en 1919.
La historia que vino después fue conocida y el marinero saltó a los cortometrajes en 1933, cuando fueron adaptados a la pantalla las historias del Timble Theatre, la tira perteneciente al diario neoyorquino.
Para más datos, Olivia –la eterna enamorada de Popeye- también se inspiró en una mujer real, que respondía al nombre de Dora Paskel mientras que el acérrimo enemigo del marinero, Blutus, solía ser un hombre fornido que se encontraba en los muelles y se peleó con Fiegel. ¿Quién ganó la pelea pese a la enorme diferencia? La respuesta es más que obvia.
1 Comment
[…] fot. lavereda.com.ar […]