Inicio»Teatro»Un director mendocino ganó concurso del Teatro Nacional Cervantes

Un director mendocino ganó concurso del Teatro Nacional Cervantes

5
Compartidas
Pinterest WhatsApp
Tiempo de lectura: 2 minutos

“Sirenas” es el nombre de la puesta que resultó ganadora del concurso lanzado por el Teatro Nacional Cervantes y de esta manera, la obra realizada por el mendocino Gabriel Jiménez, será llevada a escena.

El texto de Jiménez fue elegido por el jurado entre 1548 proyectos presentados en el marco del concurso “Nuestro Teatro” y ahora será interpretado y dirigido por artistas del tradicional recinto porteño, en colaboración con el Instituto Nacional del Teatro.

El director mendocino representó con su obra a la región de Nuevo Cuyo en el concurso que tenía por finalidad estimular y generar contenidos con un proyecto solidario, para que las artes escénicas sigan funcionando.

El Jurado de selección final estuvo constituido por Romina Chepe, Mónica J. Paixao y por las autoridades del propio Teatro Cervantes, Rubén D’Audia y Sebastián Blutrach.

En las próximas semanas comenzará el proceso de pre producción de cada obra, con el llamado a directores y conformación de elencos artísticos y técnicos. La etapa de ensayos comenzará una vez que sea aprobado el protocolo de la actividad teatral correspondiente.

Con respecto a “Sirenas”, relata la rutina de un supermercado de barrio que resulta alterada por la particular iniciativa de uno de sus clientes y el efecto que esto genera en el resto de las personas allí presentes.

Lentamente el afuera comienza a filtrarse en forma de sirenas que invaden ese búnker en el que se encuentran. Ese canto es lo único que puede entrar o salir del lugar, mientras quienes lo escuchan se parecen cada vez menos a quienes entraron esa mañana en el supermercado.

La obra explora algunas de las temáticas que el escritor y poeta ha venido abordando desde la poesía: la violencia, la desigualdad y el extractivismo. «Se trata de una propuesta hiperrealista cuyos personajes toman la voz para evidenciar el sostenimiento o la caída de un orden/sistema en torno a cuestiones de género, clases y la romantización de una salida a todo esto», detalla su autor quien debuta, con este texto, en la dramaturgia.

El humor encierra cierta tragedia, en esta historia que nos sitúa en la cotidianidad de un supermercado de barrio, en el momento en que ocurre un hecho inesperado. Gabriel explica: «Si bien hay un tono que por momentos se acerca a la comedia, los giros de la trama hacen que la obra nunca termine de serlo. Subyace, también, una crítica -en el sentido de análisis- sobre lo que consideramos que no debería ocurrir».

Artículo anterior

Pedro Aznar regresa a los conciertos en vivo vía streaming

Próximo artículo

El ex Suéter Alejandro Desilvestre presenta su nuevo material