En el marco del Festival de Cine Fantástico de Cataluña (Sitges), dos realizadoras nacionales fueron destacadas por sus producciones “Marea alta” y “Los que vuelven”.

Se trata de Verónica Chen y Paulina Casabé, quienes se quedaron con los galardones Blood Window (“Marea Alta”) y Noves Visions (“Los que vuelven”), respectivamente.

En ese contexto, “Marea Alta” fue distinguida como Mejor Película Iberoamericana; mientras que “Los que vuelven” fue distinguida como Mejor Dirección.

En su película, Chen ubica la trama en el marco de una refacción de una casa de veraneo. Allí la protagonista se verá invadida por los obreros en una historia que se abre paso a puro suspenso sobre temas como el sexismo, la lucha de clases y los mecanismos del poder.

Por su parte, Casabe nos ubica en principios del siglo XX, un drama histórico que se fusiona con el terror sobrenatural en un paisaje selvático. Una mujer desesperada invoca a la Iguazú para que devuelva a su hijo a la vida. Lo hace a pesar de que, para los indígenas, esté prohibido.

Ambas películas formaron parte de la selección de películas iberoamericanas del sello Blood Window en Sitges, fruto de la articulación del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales con el Festival catalán, que este año contó con gran participación del cine nacional.

Por otro lado, “El elemento enigmático”, de Alejandro Fadel, fue destacado con una mención especial del jurado en la sección Noves Visions, mientras que “Luz Distante – Parte 1, Les desventurades”, del director Santiago Reale, ganó el premio al mejor cortometraje Noves Visions Petit. Además, Demián Rugna se quedó con el Premio Runner up por su película “Cuando acecha la maldad”.