Ante el contexto de sanitario generado por la pandemia, el Ministerio de Cultura de la Ciudad puso a disposición distintos recintos culturales porteños como centros de vacunación.

De este modo, a los centros de testeos que ya se encontraban en funcionamiento como el Teatro Colón (Cerrito 628) y la Usina del Arte (Agustín Caffarena 1), que ahora también funciona como vacunatorio, se suman los siguientes recintos:

Centro Cultural Recoleta (Junín 1930).

Centro Cultural Centeya (Av. San Juan 3255).

Casa del Historiador (Bolivar 466).

Centro Cultural Adán Buenos Ayres (Av. Eva Perón 1400).

Por otro lado, el área cultural de la Ciudad tiene a su cargo la coordinación de los centros de vacunación que funcionan en el Club Boca Jr. Social (20 de Septiembre y Martín Rodri) y Club Huracán (Av. Caseros 3159).

Según expresó el ministro de Cultura porteña, Enrique Avogadro, “estamos acompañando al Ministerio de Salud de la Ciudad en el desarrollo del plan de vacunación para que llegue a todos los vecinos” y agregó: “Trabajamos para que cada vez sean más las personas que reciben la vacuna”.

A su vez, Vivi Cantoni, subsecretaria de gestión cultural de la Ciudad, afirmó que “en este momento clave, en el que todos los esfuerzos están puestos para cuidar la salud de las vecinas y los vecinos, transformar varios edificios como la Usina y la Casa del Historiador en centros de vacunación era necesario. Junto con el Ministerio de Salud de la Ciudad pudimos lograrlo y aunar esfuerzos entre todos para que el proceso de vacunación sea lo mejor posible”.

Actualmente la Ciudad cuenta con 180 puestos de vacunación distribuidos en 29 centros. Allí, los adultos mayores de 80 años ya se están vacunando. Se han asignado hasta el momento 40.000 turnos para este sector de la población que se vacunará durante los próximos ocho días. Y ya se empadronó a 60.000 adultos mayores a quienes se les otorgará un turno a medida que la ciudad reciba nuevas dosis por parte del Gobierno Nacional siguiendo con el cronograma y el protocolo establecido.

Al mismo tiempo continúan los testeos exclusivos para la comunidad cultural para garantizar la seguridad de los trabajadores y el público en cada función.