La muralista Milu Correch, reconocida mundialmente, terminó una espectacular obra en pleno centro de Berazategui.

La imagen está en la pared de un edificio de Avenida 14 y 150. “Me pareció muy buena la idea, me resultó interesante el formato -a lo largo- y trabajar con andamio colgante me gusta mucho. Lo que hice en esta pared es la representación de una mujer no hegemónica. Es algo en lo que vengo trabajando desde hace bastante, que forma parte de una serie de obras que vengo desarrollando”, dijo la joven artista.

Milu vive y trabaja en el barrio de Coghlan, Ciudad de Buenos Aires. Comenzó a pintar en las paredes porteñas y, en los últimos tiempos, trabajó en murales de dimensiones mucho más grandes. Sus temas se centran principalmente en figuras mitológicas y antropomórficas, fusionando la iconografía clásica, antigua y latinoamericana con personajes de los mitos modernos.

En este sentido, destacó la importancia de las paredes callejeras para hacer un análisis más profundo. “El espacio público es uno de los territorios donde se desenvuelve una guerra visual de la cual recibimos un montón de mensajes hegemónicos. Es importante que se comuniquen ideas, que si bien no son contrahegemónicas, que por lo menos no vayan de la mano de la hegemonía o sistema”.