Con localidades agotadas, se produjo el regreso del público al CCK
Luego de varios meses de ausencia y con propuestas únicamente vía online, el Centro Cultural Kirchner (CCK) volvió a abrir sus puertas y con localidades agotadas.
Con una jornada llena de música y un repertorio clásico, desde temprano la gente se agolpó al tradicional recinto de la calle Sarmiento, respetando distancia y con los protocolos sanitarios correspondientes.
Una vez finalizados los chequeos necesarios, el Auditorio Nacional recibió el órgano Klais Opus 1912, dando inicio a la apertura del concierto, con la obra más famosa del repertorio para el instrumento: la tocata y fuga en re menor de Johann Sebastian Bach, interpretada por el organista Matías Sagreras.
Después fue el turno del dúo integrado por la cantautora Nadia Larcher y el pianista Andrés Beeuwsaert, que ofrecieron conmovedoras versiones de “Para ir” de Luis Alberto Spinetta, “Silencio”, de Nadia Larcher, y “La diablera”, de Hilda Herrera y Antonio Nella Castro.
Como gran cierre, el pianista Horacio Lavandera interpretó dos obras de Astor Piazzolla (“Adiós Nonino” y “Libertango”), a poco de cumplirse los 100 años del nacimiento del gran compositor marplatense, como adelanto de los grandes conciertos que el Centro Cultural presentará en 2021. El concierto cerró a pura emoción, con el Himno Nacional Argentino en las manos de Lavandera.
Durante la jornada, el ministro de Cultura de la Nación, Tristán Bauer, afirmó que se trató de “un día muy emotivo porque iniciamos la etapa del reencuentro y de la apertura con un bellísimo concierto”.
El funcionario a su vez agregó que “comienza un camino importante con una modalidad distinta, tanto para el público como para los artistas, con controles y protocolos que vamos a desarrollar con la mayor responsabilidad para disfrutar de las actividades culturales y artísticas que son tan necesarias y tan importantes para todas y todos”.
Para Bauer se dio inicio a “una etapa de reactivación; de mayor producción y trabajo, siempre con el objetivo primordial de fortalecer a las industrias culturales”.
Por su parte, Martín Bonavetti, subsecretario de Gestión de Espacios y Proyectos Especiales del Ministerio de Cultura, resaltó la importancia de volver a “encontrarnos con el público y con nuestros trabajadores, que permitieron que el Centro Cultural no detuviera su ritmo de producción y generará sus propios contenidos virtuales a lo largo de esta etapa”.
Para Bonavetti “esta modalidad de contenidos digitales nos permitió generar más de 500 producciones y mantener el vínculo con los artistas en torno a la necesidad de reflexionar y producir pensamiento, en una coyuntura tan excepcional como urgente. Pero nos faltaba encontrarnos cara a cara, con todos y todas”.
Finalmente, Verónica Fiorito, directora general del Centro Cultural Kirchner, se mantuvo en la misma línea, donde con esta reapertura “Marcamos un tiempo nuevo, animamos los espíritus para la escucha luego de los rumbos que las expresiones artísticas tomaron en tiempos de cuarentena”.
Para Fiorito, ver al recinto abierto significó “una continuidad de la relación, de los lazos que mantuvimos y avivamos” durante este año con los artistas.
“Estos escenarios esperaron activos la presencia física, los artistas estuvieron siempre acá, no son los que concurren hoy a las salas quienes esperaron por los artistas sino al revés. Esa espera fue acción para pensar otra vez que queremos en los escenarios, arriba y abajo, fomentar relaciones de circulación entre les que asistan, les que producen y les que aporten espíritu crítico a estos tiempos”, finalizó.