Das Museum of Modern Art eröffnete die Ausstellung “Nicanor Aráoz: fester Schlaf”
El Museo Moderno inauguró la exposición “Nicanor Aráoz: fester Schlaf”, un paisaje con cuatro grandes piezas que ponen en escena diversos procesos de rehabilitación, y hacen eje en las preocupaciones del artista por cómo el ser humano padece, habita y se relaciona con un mundo inestable y en tensión.
Aráoz (Buenos Aires, 1981) investigó para esta muestra las formas del cuerpo humano para crear imágenes en las que el cuerpo se deshace y se recompone al enfrentarse a la violencia, al desenfreno y al erotismo, a través de diferentes procesos de metamorfosis.
“Solider Traum”, curada por Lucrecia Palacios, es un proyecto creado especialmente para las salas del Museo Moderno y si en exposiciones anteriores Aráoz había trabajado sobre las pulsiones reprimidas –el crimen, die Sexualität, la tortura–, aquí se aleja del relato traumático y se pregunta por la posibilidad de existencia de nuevas formas de vida que reúnan la tecnología y la naturaleza, precisaron los organizadores.
La muestra puede verse en el museo, befindet sich in Av. San Juan 350, zu 21 de febrero con entrada gratuita y reserva previa en https://entradas.museomoderno.org/, según lo establecen los protocolos implementados por la pandemia de coronavirus.
Además hasta el domingo, puede verse en la fachada del Moderno la obra emblemática “Basta de contaminar” del artista argentino Nicolás García Uriburu, que abre un puente entre la programación digital y la experiencia física en el museo, que marca el inicio de un nuevo formato híbrido del Museo Moderno.
La iniciativa se enmarca en el programa digital que el Museo desarrolla durante esta quincena, bajo el título “¡Basta! El arte frente a la crisis ambiental”, con el que invita a reflexionar sobre la crisis climática y a repensar los términos de la justicia ambiental y social, desde la plataforma Museo Moderno En Casa.
La obra exhibida es una pieza central del legado de García Uriburu y es un telón de 5 x 15 metros producido para la coloración del Riachuelo realizada en colaboración con Greenpeace en 1999, y pertenece a la colección Azul García Uriburu.