Uno de los filmes más queridos del cine nacional vuelve a las salas: “Esperando la carroza”, la película que se convirtió en un fenómeno popular desde su estreno en 1985, será reestrenada para conmemorar sus 40 años.
Esta obra, dirigida por Alejandro Doria y protagonizada por un elenco estelar que incluye a Luis Brandoni, China Zorrilla, Antonio Gasalla, Julio De Grazia y Betiana Blum, ha trascendido generaciones, consolidándose como un clásico indiscutido de la cultura argentina.
El anuncio del reestreno ha generado una ola de entusiasmo entre fanáticos y cinéfilos, que podrán volver a disfrutar de esta historia coral, tan hilarante como entrañable, en el mismo escenario en que nació su magia: una sala de cine. La cita es el 8 de mayo, fecha que promete convertirse en una celebración colectiva del humor criollo, la sátira costumbrista y la identidad nacional.
Estrenada originalmente en 1985, la película cuenta con un guion basado en la obra teatral de Jacobo Langsner y se centra en una disfuncional familia porteña que, en medio de una confusión absurda, revela sus miserias, sus prejuicios y también, a su manera, su ternura. Con frases que ya son parte del habla cotidiana y escenas que se volvieron memes antes de que existieran las redes sociales, “Esperando la carroza” ha sabido mantenerse vigente en la cultura popular.
El regreso del film no solo responde a su valor nostálgico: en un presente donde el humor argentino atraviesa cambios y desafíos, la película reafirma su lugar como referente y espejo de una forma muy particular de ver el mundo. Como muchos de sus seguidores suelen señalar, no se trata solo de una comedia: es una radiografía de época, con personajes entrañables y situaciones tan exageradas como reconocibles.
A lo largo de los años, el film ha dado lugar a análisis, homenajes, funciones especiales, adaptaciones teatrales y toda clase de reuniones temáticas. Sin embargo, su lugar natural sigue siendo el cine. De ahí que esta celebración de los 40 años sea una oportunidad única para revivirla como fue pensada originalmente, y reconectar con esa mirada entre ácida y tierna que tan bien supo retratar a la familia argentina.
