El Museo de Arte Moderno de Buenos Aires presentó “Un día en la vida”, la primera muestra individual en la ciudad de la artista mendocina, que transforma la energía del cuerpo en imágenes vibrantes y escénicas.
A sus 27 años, Quintero despliega una propuesta que condensa pintura, acción performática y una energía urbana y vital que se traduce en imágenes que vibran como cuerpos en escena.
Con obras producidas especialmente para esta ocasión, la exposición plantea un cruce potente entre las artes visuales y el lenguaje del cuerpo. Cada pieza parece surgir del vértigo de una jornada intensa, como si capturara el pulso eléctrico de una performance: figuras que se funden, cuerpos que se abrazan, gestos suspendidos en una coreografía pictórica que desborda los bordes del lienzo. “Un día en la vida” funciona, así, como un laboratorio de emociones, deseo y ritmo.
“La obra de Valentina se sostiene en la memoria del cuerpo y en la vitalidad de su experiencia personal con la noche, la cultura urbana y las formas de la fiesta”, explica Raúl Flores, curador de la muestra, quien acompañó el proceso creativo junto al museógrafo Iván Rösler y el productor Edgar Lacombe. Las imágenes, montadas sobre fondos oscuros y en gran formato, remiten al muralismo por su escala y presencia, pero despliegan un lenguaje completamente actual, atravesado por el gesto inmediato y los contrastes intensos.
Lejos de buscar una representación estática, Quintero pinta desde la acción, desde una búsqueda de movimiento. “Son estudios anatómicos que no buscan la fijeza, sino el temblor del movimiento, la vibración de un cuerpo en tránsito entre la vida nocturna y la cultura urbana”, puede leerse en el texto curatorial. En ese tránsito aparecen cuerpos que se funden y entrelazan, como si tejieran un relato compartido que nunca se termina de cerrar: una historia que queda suspendida, en el punto exacto donde se respira la vida.
Nacida en Mendoza en 1997, Valentina Quintero —también conocida como Valentine— es artista visual, cantante y performer. Su formación combina las artes visuales, el diseño multimedial y el teatro, con estudios realizados en el IES Manuel Belgrano y en la Universidad Nacional de Cuyo, además de múltiples instancias con referentes como Diana Aisenberg, Silvio Lang y María Godoy. Esta diversidad formativa se refleja en su obra, que desde el inicio se ha caracterizado por la hibridación de lenguajes y la exploración de formatos no convencionales.
Quintero comenzó su recorrido artístico en 2015 como parte del colectivo Ricarda Espinosa, y rápidamente inició un camino propio en el que se destacan las performances, las instalaciones y los happenings. Desde entonces, ha realizado un notable número de exposiciones individuales: “Chicos confundidos y yo” (ECA, Mendoza, 2023), “Templo II” (Valerie’s Factory, Buenos Aires, 2023), “Miro la vida pasar” (Casa Colmena, Mendoza, 2019), “Vesti la Giubba” (Proyecto Galería, Buenos Aires, 2019), “Scary Mostra” (Imagen Galería, Mendoza, 2018), “Templo” (Imagen Galería, Mendoza, 2017) y “Red Carpet” (Museo Municipal de Arte Moderno, Mendoza, 2016).
En paralelo, ha participado en destacadas exposiciones colectivas, entre ellas “Casi Ángeles” (Galería Barro, Buenos Aires, 2023), “Twinks vs Dolls” (Galería Hipopoety, Buenos Aires, 2023), “Arte, género y política” (Biblioteca San Martín, Mendoza, 2018) y “Como ecos en la bruma”, una muestra a dúo junto a María Filomena Pierri presentada en Pionera (Buenos Aires, 2015/2017).
