La reapertura del Teatro Alvear se encuentra en la recta final
Avanzan las obras de puesta en valor del Teatro Alvear, uno de los íconos de la Avenida Corrientes que regresará a mediados del mes próximo.
Vale señalar que estas obras que se llevan adelante a través del Gobierno porteño y el Complejo Teatral de Buenos Aires (CTBA) corresponden a la segunda etapa, que tuvo inicio en agosto pasado y actualmente se encuentran en la parte final.
Bajo ese contexto, las obras contemplaron la mejora integral de la sala, escenario y camarines, entre otros.
Sobre estos trabajos finales, el ministro de Cultura porteño Enrique Avogadro sostuvo que “estamos felices de anunciarles a los vecinos, turistas y a toda la comunidad artística, que, a partir de julio, todos los que viven y visitan la Ciudad van a poder presenciar la reapertura del queridísimo Teatro Alvear”.
El titular de la cartelera de Cultura de la Ciudad agregó que se trata de “un escenario emblemático de la calle Corrientes, que volverá a brillar y a ser un icono de la cultura de nuestra ciudad”.
Asimismo, Gabriela Ricardes, directora del CTBA manifestó que este recinto “completa y complementa la red del Complejo Teatral de Buenos Aires”, explicando que “partimos del desafío de recuperar su arquitectura y ponerla en diálogo con la actualidad; de modernizar sus condiciones escénicas y al mismo tiempo recuperar los antiguos sistemas necesarios para su funcionamiento”.
Ricardes detalló que el objetivo principal de estas tareas fue el de “dotar de comodidad y seguridad a los artistas, a los creadores y al público. Un trabajo que buscó conservar la esencia y expresar el carácter único de este teatro ícono de la cultura”.
Como consecuencia, “estamos orgullosos del resultado y del proceso que involucró a los trabajadores del CTBA sin los cuales no hubiese sido posible”, finalizó Ricardes.
Cabe destacar la tarea realizada por la artista y escenógrafa Julieta Ascar, quien estuvo a cargo de la concepción estética de la restauración arquitectónica teatral.
Los trabajos buscaron combinar artes y oficios tradicionales con nuevas tecnologías y fue Ascar quien tomó como punto de partida revitalizar las formas orgánicas de la arquitectura original del auditorio, incluyendo la paleta cromática recuperando los materiales tales como bronces, madera y colores originales de pintura.