Según datos de AADET, el mes de mayo presentó una merma del 17% de espectadores respecto al mismo mes del año pasado. El acumulado del año también muestra números negativos, aunque se mantienen por encima de la era prepandemia.
La actividad teatral en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires sufrió en mayo un importante descenso en la asistencia de público. De acuerdo con el más reciente informe de la Asociación Argentina de Empresarios y Empresarias Teatrales y Musicales (AADET), la cantidad de espectadores en salas comerciales registró una caída del 17 por ciento en comparación con el mismo mes de 2024. Esta tendencia negativa también se extiende al acumulado del año: entre enero y mayo de 2025 se observa una baja del 9 por ciento en la concurrencia de público y una disminución del 10 por ciento en el volumen total de funciones ofrecidas.
A pesar de esta contracción, el sector aún sostiene cifras superiores a las de la etapa previa a la pandemia, un dato que pone en perspectiva los desafíos actuales sin perder de vista el largo proceso de recuperación que vive la actividad. Según se puede ver en el informe, la cantidad de espectadores promedio por función ha aumentado un 1 por ciento respecto al año pasado, ubicándose como el segundo mejor índice en los últimos siete años.
Otro dato que llama la atención es la altísima concentración de público en una pequeña cantidad de títulos: el 40 por ciento de las personas que asistieron al teatro durante este período lo hicieron a ver tan solo 10 espectáculos, de un total de 319. Esta cifra se traslada directamente al plano económico, ya que esas mismas diez propuestas generaron el 47 por ciento de la recaudación total. Esto refleja una concentración notable de la atención del público en pocas obras, en un escenario con una oferta creciente.
De hecho, el número de títulos estrenados o reestrenados durante los primeros cinco meses del año alcanzó una cifra récord: 319 espectáculos, lo que representa un crecimiento del 13 por ciento en relación al mismo período de 2024. Se trata de un indicador positivo que muestra una escena vibrante y en movimiento, aunque el rendimiento promedio de las obras no acompañe la expansión en cantidad. Según el informe de AADET, la cantidad de funciones promedio por obra cayó un 20 por ciento respecto al año anterior, ubicándose en unas 11 funciones por espectáculo. Se trata de una tendencia descendente que se ha mantenido constante en los últimos años.
Así, mientras la cartelera se multiplica y ofrece una variedad sin precedentes, el sostenimiento de funciones y el recambio del público continúan siendo un desafío central para la industria. Si bien las cifras aún están por encima de los niveles previos a 2020, el informe confirma un panorama de contrastes: más obras en cartel, pero con menor continuidad y un público cada vez más selectivo en su elección de qué ver.
Fuente: Asociación Argentina de Empresarios y Empresarias Teatrales y Musicales (AADET)