La Galería Mar Dulce presentará vía Instagram el “Manual de historia argentina II”, que reunirá una serie de óleos pertenecientes al artista Javier Velasco.

La cita será este viernes 5 de noviembre desde las 19 horas a través de la cuenta oficial del recinto ubicado sobre Uriarte 1490, en @galeriamardulce.

Cabe señalar que esta muestra es la continuidad de la inaugurada en marzo de este año, que contó con creaciones que brindaban un recuerdo de la escuela y resaltaban el panteón de héroes nacionales.

Dentro de ese contexto, Velasco presentaba sus pinturas con un estilo entre el juego de los soldaditos y el humor negro: explosiones estrafalarias, cabezas que volaban y chijetes de sangre que alternaban con el rigor histórico del color de los uniformes y la iconografía oficial.

Esta segunda muestra trata en gran parte de la historia que pasa por las aulas como un rápido susurro ya que no hay nada que pueda enorgullecernos en sus hechos, una historia oscura y siniestra que muestra una Argentina dividida por la violencia y el disenso: “El asesinato del Chacho Peñaloza” es un buen ejemplo.

Ángel Vicente Peñaloza no era solo un general del ejército, era un líder sexagenario que presentó su rendición a oficiales del ejército de línea y que fue brutalmente asesinado de un lanzazo en el mismo momento de su entrega.

Domingo Faustino Sarmiento, como Director de Guerra, no solo celebró la medida, sino que festejó la decapitación del Chacho y la exhibición del despojo en una plaza en el pueblito riojano de Olta. “El fusilamiento de Dorrego”, otra de las obras expuestas, nos enseña sobre los excesos del general Lavalle, quien luego de un golpe de estado ajusticia “por su orden” y sin juicio al legítimo gobernador de Buenos Aires con la intención de “la de cortar la cabeza de la hidra” y acabar con los federales porteños. A estas clases de historia le siguen las pinturas de “El Asesinato de Quiroga”, “La fuga con el cadáver de Lavalle por la Quebrada de Humahuaca” y “El Asesinato de Urquiza” y otras como “25 de Mayo”, mechadas con aquellas que sí nos enseñaron de soslayo como pequeños tropiezos en el camino de un ascenso glorioso (antes de caer en la guerra civil), “El desastre de Huaqui”, “La sorpresa de Cancha Rayada” y “Vilcapugio”.

Como consecuencia, la muestra lleva consigo algo hipnótico. La carga de colores en su danza de celestes y rojos, la violencia exagerada del comic que se enfrenta a la violencia exagerada de la vida real en un conflicto bélico, el saber que estos acontecimientos sucedieron y que a la vez los tenemos cubiertos por desentendimiento, olvido, o por vergüenza curricular al no saber muy bien qué hacer con ellos. Pero aquí están, reaparecen en las pinturas de Velasco como el Lado B de la escuela y gracias a él son revisitados.