El Centro Cultural Recoleta abrió sus puertas a tres nuevas propuestas que recorren distintos lenguajes y sensibilidades de las artes visuales.
En la sala 5, Soledad Dahbar presentó “La gravedad del brillo”, mientras que en la sala 6 Celeste Martínez Abburrá y Marcela González exhiben “Un final programado”. Ambas fueron seleccionadas dentro de la Convocatoria de Artes Visuales 2025. En paralelo, la sala 13 recibe la primera exposición individual de Milagros Schmoll en Buenos Aires, titulada “Mi alma gemela” y curada por Rodrigo Alonso.
“La gravedad del brillo” (sala 5) reúne las investigaciones de la salteña Soledad Dahbar en torno a los vínculos entre los seres humanos y materiales no orgánicos como metales y minerales. La artista trabaja sobre la minería, sus raíces coloniales, sus implicancias extractivas y el modo en que esos procesos atraviesan lo social y lo económico en la actualidad.
Por su parte, “Un final programado” (sala 6) es el resultado del trabajo conjunto de Celeste Martínez Abburrá (Villa María, 1973) y Marcela González (Buenos Aires, 1966), quienes desde hace tres años exploran una práctica colaborativa en la que se cruzan arte, ciencia y tecnología. La muestra propone un recorrido que incluye instalaciones, esculturas y piezas audiovisuales en un paisaje íntimo y sutil, planteando preguntas sobre los límites entre cuerpo, percepción y tecnología.
Finalmente, “Mi alma gemela” (sala 13) reúne unas veinte obras de Milagros Schmoll creadas durante los últimos quince años y exhibidas en diferentes países. Por primera vez se presentan juntas en Buenos Aires, conformando un universo en el que predomina la pintura en técnicas como óleo, acrílico, cera y otros materiales. Se trata de composiciones abstractas, de texturas marcadas y paletas equilibradas que transmiten armonía y contemplación. Los títulos, asociados a espacios y sensaciones, invitan a una experiencia introspectiva y cercana al pensamiento de la artista.
Las tres exposiciones pueden visitarse en el Centro Cultural Recoleta (Junín 1930) de martes a viernes entre las 12 y las 21 horas, y los sábados, domingos y feriados de 11 a 21 horas. El acceso es libre y gratuito para residentes y ciudadanos argentinos.