Luego de la medida dictada por las autoridades gubernamentales, el Complejo Teatral de Buenos Aires (CTBA) anunció el regreso de funciones presenciales a sus respectivas salas.

En ese contexto, en las últimas horas se confirmaron los espectáculos de teatro, danza y títeres que podrán ser disfrutados bajo estrictos controles sanitarios y respetando un aforo reducido.

Los primeros en regresar serán los miembros del Grupo de Titiriteros del CTBA, que el sábado 19 estarán –desde las 17- en la Sala Martín Coronado del tradicional recinto ubicado sobre la Avenida Corrientes 1530 con “El gran circo”, uno de los clásicos inoxidables que viene realizándose desde hace ya cuatro décadas.

Con respecto a las localidades, podrán adquirirse desde mañana a partir del mediodía por medio del sitio oficial del CTBA, haciendo Click Aquí!

Cabe agregar que las funciones se repetirán el fin de semana correspondiente al 26 y 27 de junio, desde las 17.

A su vez, el sábado 26 se presentará en la sala Cunill Cabanellas “Tu amor será refugio”, una obra de Juan Ignacio Fernández con dirección de Cristian Drut.

Protagonizada por Luciano Ricio, Yanina Gruden, Matilde Campilongo, Aldana Illán, Ignacio Henríquez y Alejo Sulleiro, esta puesta adquirió mayor resonancia a raíz de la actual situación de pandemia, ya que su historia se relaciona con la imposibilidad de un acercamiento concreto y la lejanía que se interpone ante los cuerpos familiares.

Otro espectáculo en regresar es “¡Recital Olímpico!”, el proyecto en colaboración de Camila Fabbri y Eugenia Pérez Tomas, que se presentará en el Teatro Sarmiento (Avenida Sarmiento 2715).

En total serán cinco únicas funciones (viernes 25, sábado 26 y domingo 27 de junio y viernes 2 y sábado 3 de julio), siempre a partir de las 19 horas.

“¡Recital Olímpico!” es una experiencia singular donde las autoras y directoras continúan con su indagación en biografías como plataforma para la ficción. En este caso, con las figuras de Nika Turbina –poeta ucraniana– y de Nadia Comaneci –atleta rumana– para generar un cruce poético entre pasado y presente, un mundo onírico que borronea el tiempo y extraña la realidad.