“Universos infinitos dentro de pequeños cráneos” es uno de los grandes estrenos teatrales de la temporada. No solo la crítica ha destacado esta puesta escrita por Sebastián Rigolino y dirigida por Peto Menahem, sino también el público acompañó desde su salida, agotando absolutamente todas las funciones hasta ahora en El Método Kairós.

Pero el principal atractivo de esta propuesta es la sólida y contundente actuación que brinda el protagonista Hernán Sem, quien interpreta a los cuatro personajes de este unipersonal plagado de un humor ácido e irónico.

En la obra se ven plasmadas cuatro personalidades totalmente diferentes, pero a la vez unidas por un hilo conductor que mantendrá atrapado hasta el final al espectador.

La Vereda entrevistó en exclusiva a Sem, quien explicó que la obra “surgió en los primeros días de marzo de 2020, en plena pandemia”. En ese contexto, “Sebastián (Rigolino) tenía algo en mente y yo también, lo fuimos uniendo y trabajando juntos”.

“Siempre nos pareció una buena idea el unipersonal, más que nada por lo que estábamos viviendo. Dijimos ‘qué mejor idea entonces, un actor en una punta, el director en otra, un asistente por ahí, todos bien separados’. Yo ya había hecho unipersonales, así que decidimos hacerlo”, agregó el protagonista.

Cabe señalar que, además de dramaturgo, Sebastián Rigolino es psiquiatra, algo que sin dudas benefició a la obra aportando detalles y puntos de vista clave. “Sebastián trabajó más que nada en Manito, el último personaje”, explica Sem. Esa construcción del personaje también se dio con el apoyo “en videos y en sus palabras; fue un muy lindo trabajo de creación del personaje”.

Una vez pensada la historia, llegó el momento de ir pensando en la dirección y ahí es donde aparece el nombre de Peto Menahem, alguien que –según cuenta Hernán- ya andaba dando vueltas en la mente de ambos.

“Ya teniendo todo armado necesitábamos un director, porque no sabíamos cómo abordar este texto que es realmente muy difícil”, explica Hernán y añade: “Necesitábamos un director con ese oficio, mirada y talento. Aunque él pone en duda eso que llamamos talento”.

La entrada de Menahem a la obra fue “fundamental” según define el protagonista ya que “es una persona de una gran generosidad” y de quien “siempre me llevé algo nuevo de cada encuentro”.

¿Disfrutaste más a alguno de esos cuatro personajes? ¿Cuál fue el más difícil de realizar?

Me resultaron todos difíciles, pero La Liebre –el primer personaje-, El Jilguero –el tercero-…fueron los más complejos. Al principio el proceso de ensayos, de búsqueda y creatividad, a veces uno no se siente bien. Al menos yo no me sentía bien en esa búsqueda que a veces es súper cómoda y divertida pero a veces todo lo contrario. Ahora los disfruto a todos.

¿Pensaron en algún personaje más que luego fue descartado o siempre la obra fue hecha para cuatro?

Siempre fueron cuatro personajes. Creo que Sebastián así lo hizo, aunque alguna vez me pareció haber escuchado que tenía un quinto, El Cuervo. La obra cuenta con La Liebre, El Grillo, El Jilguero y Manito. Uno de ellos menciona al Cuervo y tenía en un rincón de su cabeza crearlo, pero nos quedamos con cuatro.

Ante tanta demanda teatral porteña, desde que arrancaron siempre tuvieron sala llena… ¿qué significa esto para ustedes luego de haberla pasado tan mal por la pandemia?

Significa una alegría enorme. Yo en realidad ya estaba feliz por contar con Peto, por empezar a ensayar, tener un lugar, por tener fecha de estreno y después sí, llegaron las funciones a sala llena. Todo esto es una alegría muy grande.

¿Qué comentarios recibiste por parte del público? ¿Hubo alguien que se haya sentido ligado a la historia?

Los comentarios son muy buenos. Cada vez que entramos al día siguiente al Instagram o en Alternativa vemos buenos comentarios. Tuvimos esa suerte y también estamos felices con eso.

¿Cómo sigue el año para el espectáculo?

La obra seguirá hasta fin de año. Eso intentaremos. Sé que tenemos fechas hasta noviembre e incluso existe la posibilidad de llevarla a diferentes escenarios del interior, pero eso ya sería para el año próximo quizá.

¿Cuáles son tus proyectos para lo que resta del año?

En lo personal seguir disfrutando de esta obra que nos ha dado mucho trabajo y realmente estamos muy felices. Después, veremos lo que pueda surgir.

“Universos infinitos dentro de pequeños cráneos” se presenta todos los viernes desde las 23 en El Método Kairós, con entradas a la venta en las boleterías del recinto ubicado en El Salvador 4530 o bien por el sistema Alternativa Teatral.